MALBEC




El Malbec es el vino tinto emblemático de Argentina. Originaria del sudoeste de Francia en la región de Cahors, donde se la denominaba Cot.

Es la variedad tinta que mejor se ha adaptado al suelo argentino donde encontró las condiciones ecológicas ideales para su desarrollo, dando vinos excepcionales. Aunque no se conoce ciertamente el origen de su nombre, hoy el mundo está comenzando a asociar los vinos argentinos con la expresión de esta cepa tinta de gran personalidad.


En su lugar de origen se la conocía como el “vino negro de Cahors”. Fue una variedad importante hasta la época de la filoxera, quedando relegado, hasta que a partir del año 1940 comenzó su replantación.

En Argentina habría sido introducida por Luis Pouget a mediados del siglo XIX y tuvo una rápida difusión en la provincia de Mendoza, llegando a existir más de 50.000 has.

Argentina está reconocida como el país productor de los Malbec más refinados y los vinos Malbec de Mendoza son considerados los mejores del mundo. Es el vino emblemático y Malbec Luján de Cuyo es la primera Denominación de Origen (DOC) de América.

El Malbec Presenta un color muy intenso y oscuro de tipo rojo cereza que puede llegar a parecer casi negro. Los vinos Malbec son cálidos, suaves y con taninos dulces muy agradables. Con frescos aromas afrutados durante su juventud, luego evoluciona con aromas a canela y toques de vainilla; son vinos con gran cuerpo, estructura y profundos. La ciruela es una de las características del Malbec. Brindan una amplia capacidad de envejecimiento en madera tanto como varietales o como complementarias.

Vista: El Malbec presenta un color rojo profundo, rubí intenso con matices violáceos o azulados que puede llegar a parecer casi negro, durante los dos primeros años estos colores están definidos por el rojo cereza o rojo guinda.

Olfato: En nariz son florales y frutales (frutas salvajes y frutos secos). De aroma intenso y frutado, dentro de los aromas principales de este vino podremos encontrar guindas, ciruelas, café, chocolate, cuero, trufa, vainilla, uvas pasas, entre otros. La vainilla aparece por la oxidación en madera de roble en las barricas en combinación con los polifenoles del vino.

Sabores: Son cálidos, suaves y con taninos dulces muy agradables. A la boca pueden apreciarse sabores a mermelada de ciruela, dulce de guinda, chocolate, frutas secas, vainilla y gustos balsámicos. Suele haber notas herbáceas cuando no es vendimiado en su óptima maduración, lo que suele determinar un gusto amargo. Cuando se envejece en botella sabe a tabaco, pimienta, canela o cuero.

Es un tinto con mucha fruta cuando joven y muy complejo cuando ha envejecido en roble nuevo pero debe cuidarse para no suavizar con la madera su madurez natural.

El Malbec es ideal para acompañar con: Carnes rojas, quesos curados, pasta con tomate, carnes a la parrilla.

La temperatura de servicio de un Malbec, la cual le permite al vino exponerse delante de nosotros destacando sus aromas y sabores, ronda entre los 16º a 18º, para un vino joven y entre los 18º-20º, para un vino de guarda. Para un Malbec de guarda seria muy interesante usar decantador, por lo menos una hora antes de beberlo.

http://anterior.inta.gov.ar/mendoza/invest/